El Correo, 27 de marzo de 2006

Ertzainas denuncian en Inspección de Trabajo el «hacinamiento» en el vestuario de la comisaría de Bilbao

 

«Están mejor los calabozos», se quejan. En los cambios de turno pueden llegar a coincidir 100 agentes. 

 

Ertzainas vinculados al Sindicato Profesional de la Ertzaintza (SIPE) han denunciado ante la Inspección de Trabajo y el Departamento de Trabajo y Seguridad Social del Gobierno vasco la «falta de espacio» en los vestuarios de la comisaría bilbaína del barrio de Ibarrekolanda. Según el escrito al que ha tenido acceso este periódico, las instalaciones, ubicadas en la planta baja del edificio, ocupan 135 metros cuadrados, los masculinos, y 100 metros, los de las mujeres.

 

En los cambios de turno, por ejemplo, en los primeros pueden llegar a coincidir hasta 100 agentes, que tienen que ponerse el uniforme o la ropa de calle. En esos momentos de máxima afluencia, «hasta nos tocamos», describen gráficamente. Además del «hacinamiento», critican que las dependencias «no disponen de taquillas separadas para las prendas del trabajo y las particulares», pese a que en su jornada pueden tener que cubrir un incendio o cualquier otra incidencia con riesgo «contaminante».

 

 En definitiva, los ertzainas consideran que «están mejor hasta los calabozos», remodelados antes de la concesión, en diciembre de 2002, del ISO de calidad en la detención. 

 

La primera denuncia al respecto se presentó en octubre de 2001. Entre las «deficiencias», se especificaban la falta de bancos, el insuficiente espacio del pasillo entre taquillas, la inexistencia de plan de evacuación y que el sistema de aireación funcionaba mal, además de que sólo había un extintor en cada sala. La Inspección de Trabajo y Seguridad Social concedió al Departamento de Interior un plazo de «tres meses» para corregir los posibles incumplimientos de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. La normativa, que Interior se comprometió a seguir, exige que «las dimensiones (de los vestuarios) deberán permitir el uso sin dificultades ni molestias, teniendo en cuenta el número de trabajadores que van a utilizarlo simultáneamente».

 

«Una planta libre» 

 

No obstante, según el SIPE, hasta la fecha no se ha adoptado ninguna medida al respecto. De hecho, en este tiempo, se ha producido un traslado de unidades y de personal de la comisaría de Bilbao a la central de Erandio y «hay una planta entera libre desde hace un año». Ante el «incumplimiento de las instituciones implicadas» que, a su juicio, han hecho «oídos sordos» a sus demandas, los denunciantes han presentado una queja al Ararteko para que medie en el problema. El Defensor del Pueblo vasco ha pedido a Interior y a Trabajo sendos informes.

 

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